Que el público se sienta reflejado y escuchado es uno de los principales motivos por los que se debería incluir una estrategia inclusiva dentro de cualquier acción de marketing digital. Además, esta es una manera de mostrar una imagen mucho más real de la sociedad en la que vivimos. A esto hay que sumarle todos estos beneficios:

  • Es una manera de llegar a todo tipo de personas y, por consiguiente, aumentar el número de clientes potenciales.

 

  • Es mucho más sencillo que la audiencia se sienta identificada en la marca, así como que simpaticen y conecten con ella.

 

  • El público tiene un respeto mucho mayor hacia aquellas marcas que siguen un marketing inclusivo y que muestran la sociedad tal y como realmente es.

 

  • Cuando el público conecta, confía y respeta a una marca, los resultados son mucho mejores, ya que prefieren comprarle a ella que a otra.

Las estrategias de marketing inclusivas tienen muchos beneficios para una marca. Sin embargo, estas deben aplicarse de forma natural y respetuosa, ya que hacerlo de forma incorrecta podría generar el efecto contrario, incluso el desprecio por el colectivo al que se hace referencia.

Toma acciones inclusivas:

Aplicar acciones de marketing inclusivo no es sencillo, ya que, tal y como hemos dicho, debe hacerse, sobre todo, de forma natural y respetuosa. Te explicamos lo que debes tener en cuenta para que tu estrategia sea todo un éxito.

Conoce a tu audiencia:

Conocer a la audiencia es clave y, en este caso, se debe hacer una investigación mucho más profunda de lo que se haría habitualmente. Además de saber la edad, su nivel de estudios, su religión y otros datos, se deben conocer sus inquietudes, preocupaciones y, en especial, sus sensibilidades. Se trata de tener un conocimiento mucho más profundo del tipo de persona que podría interesarse en ese producto o servicio para que cuando se lleven a cabo las acciones propias de una estrategia de marketing no se dañen sus sentimientos. Toda esta investigación requiere tiempo y recursos, pero es muy importante llevarla a cabo para conseguir ser respetuoso y cercano.

Historias reales:

Cuanto más real sea la historia que se explica, más impacto creará en el público. Muchas marcas cometen el error de representar a cierto colectivo en sus campañas de una forma que poco o nada tiene que ver con la realidad. En estos casos, este colectivo no se verá representado y, por consiguiente, la marca no conseguirá atraer su atención e interés.

Si se quiere reflejar a un perfil muy concreto de la sociedad, este debe mostrarse tal y como es en realidad para que puedan identificarse en él. Explicando historias reales, la marca da una imagen mucho más sincera, cercana y comprometida.

La meta es la unión de la audiencia:

A todos los colectivos les une un valor, una causa o un sentimiento. Para una marca es muy importante encontrar aquello que les une para que aparezca reflejado en el mensaje que se quiera transmitir.

Si el mensaje transmite aquello que sirve de nexo entre los diferentes individuos que forman uno o varios colectivos, este conseguirá llamar su atención y conseguirá que empiecen a interesarse en la marca. Eso sí, es muy importante que el mensaje transmitido se corresponda con las acciones que lleve a cabo la empresa. Es decir, no sirve de nada transmitir un mensaje y actuar de una forma totalmente opuesta.

Integra un lenguaje inclusivo, meditado y comprensivo:

El lenguaje que se utilice es tan importante como el mensaje en sí. Todo tiene que tener una coherencia, por lo que si este va dirigido a un público joven, deberá usarse un lenguaje juvenil y moderno, incluso hasta descarado. Esto se aplica a todo tipo de colectivos.

Usando el lenguaje apropiado, el mensaje resultará mucho más cercano y comprensible para el público al que se quiere llegar.

Representa al colectivo:

Recordemos que se trata de ser inclusivo, por lo que será necesario que haya representatividad de todos los colectivos que forman la sociedad actual. Es decir, aunque el mensaje vaya dirigido a un perfil muy concreto, se trata de mostrar la vida real y, en ella, conviven personas de diferentes edades, diferentes religiones, diferentes nacionalidades…

Si en la estrategia solo se representa a un tipo de colectivo, ya no estaríamos hablando de inclusividad. Se le puede dar más protagonismo a uno que a otro, ya que el objetivo es captar la atención del público al que le interesará ese producto o servicio, pero deben estar representados varios colectivos para hablar de inclusividad.

No caigas en estereotipos:

La sociedad actual está llena de estereotipos, sobre todo cuando hablamos de colectivos, pero estos no deben formar parte de una estrategia de marketing. Se trata de lanzar un mensaje respetuoso y de ceñirse a la realidad, por lo que hay que olvidarse de estereotipos.

Aplica la inclusividad en tu propia empresa:

No sirve de nada lanzar mensajes inclusivos en campañas si la empresa en sí es todo lo contrario. Aunque cada vez haya más empresas que estén poniendo en práctica el marketing inclusivo, este no debe aplicarse si a nivel interno la empresa no es inclusiva.

La imagen que se está mostrando al público debe ser la imagen real de la empresa, ya que crear una falsa imagen y mentir podría hacer que la audiencia sintiera rechazo y desconfianza hacia ella.

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